La palabra o la predicación de la cruz se refiere a la doctrina de la cruz, fundamental y fundacional para el cristianismo, mas necesaria para todo el mundo. Proclama la salvación sólo por medio de la expiación que hizo el Señor Jesucristo en la cruz cuando murió por todos nosotros.

“El sufrió la cruz” Hebreos 12:2

Proclama que el hombre puede ser reconciliado con Dios, perdonado y salvado sólo por los méritos e influencia de su sacrificio incomparable. La palabra de la cruz es simple y comprensible a todo ser humano. Es un solo mensaje, uniforme, coherente y verdadero. La cruz no tiene para apóstol Pablo un significado meramente material o supersticioso. Sabemos que los religiosos veneran cruces y réplicas probables de la forma del madero donde nuestro Señor fue muerto. Pueden tener ornamentos y piedras preciosas, o puede haber una emoción sentimental hacia ella, pero si no se tiene la comprensión espiritual, no pasa de ser una amuleto sin valor, un ídolo ineficaz.

La cruz nos habla de la insuficiencia humana, de nuestra incapacidad para salvarnos a nosotros mismos. Por eso hubo de morir el hijo de Dios por nosotros, llevando nuestros pecados. Nos habla de que necesitamos la salvación que sólo Dios puede darnos. Mirar la cruz nos lleva a preguntarnos ¿porqué fue necesario que un sacrificio de esta magnitud y características tuviese que ser llevado a cabo? ¿Porqué es necesario que alguien tenga que morir por otros? ¿Porqué es necesario que uno tenga que pagar la deuda de otros?, ¿No podía simplemente condonarse esta deuda? ¿No podía simplemente haber una amnistía ya que Dios es tan bueno? ¿Era tan grave la deuda?

Ya hemos visto lo que el pecado representa a los ojos de Dios, a su ser infinitamente santo y justo. Esta deuda es muy grave. El pecado tenía que ser juzgado, en cada ser humano enviándolo a la perdición, o bien en alguno que muriera por todos. Está escrito que la paga del pecado es muerte, ese es un hecho absoluto (Romanos 6:23). Por la gracia de Dios uno murió por todos (Hebreos 2:9) y por eso Dios ofrece salvación a todo aquel que cree. La justicia de Dios puesta en entredicho tenía que ser satisfecha, y “Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros” (Isaías 53:6).

¿Qué representa la cruz para el lector? Debiera hablarle de su incapacidad y al mismo tiempo del amor de Dios que ofrece la salvación eterna gratuitamente. La cruz de Cristo es la respuesta de Dios, salvadora, generosa, demandante, pertinente. Si el lector es religioso le preguntamos: ¿En el lugar donde usted asiste se predica la palabra de la cruz? No le preguntamos si donde usted asiste es posible identificar alguna cruz de madera, metal o cemento… le preguntamos ¿se predica la palabra de la cruz? No podemos quedar indiferentes frente a la cruz de Cristo. Frente a ella se puede hacer realidad su poder y ser salvado, o considerarla un sinsentido y perderse para siempre (1 Corintios 1:18). ¿Cuál es su respuesta? –rc

(Continúa)

Lectura Diaria:
1 Cronicas 13-14 [leer]
/Ezequiel 14-15 [leer]
/Juan 5:1-23 [leer]