La palabra paciencia tiene diferentes significados en el Nuevo Testamento. Entre ellos por ejemplo es el no desanimarse, o esperar largamente la realización de un deseo, perseverar, y con valentía soportar ofensas y tratos abusivos de otros. También significa no vengarse, estar lento para enojarse o sencillamente aguantar la prueba. No es fácil tener paciencia pero el Señor exhorta que sepamos hacerlo.
“Tened también vosotros paciencia; confirmad vuestros corazones: porque la venida del Señor se acerca.” Santiago 5:8.
La carta bíblica de Santiago enfatiza la necesidad de vivir la vida cristiana demostrando las virtudes que deben estar presentes en todo hijo o hija de Dios. El capítulo 5 comienza con una exhortación a ciertos hombres que se habían enriquecido a expensas de sus empleados. No es dirigida a toda persona rica, pues hay muchos cristianos que son empresarios exitosos y han tratado a sus empleados bien. La exhortación va dirigida a los que se habían portado mal con sus empleados. Les había faltado conciencia social y por tanto, Dios los consideró abusadores. Santiago dice que su ganancia malamente adquirida, a la postre ha de traer “miserias” v.1. Para Dios, sus riquezas “están podridas: (y) vuestras ropas están comidas de polilla” v.2. No es una consideración muy halagüeña. Se refiere a “vuestro oro y plata”, y Dios describe estos metales como “corrompidos de óxido” como un testimonio de su egoísmo.
¿Han visto alguna vez el oro o la plata oxidados? Si así fuera, sería indicio que las riquezas obtenidas por los ricos inescrupulosos habrían perdido su valor y ya no se pudo negociar con ellos. Los versos 4-6 describen como los labradores que fueron defraudados se han quejado a Dios en contra de sus patrones. Sus reclamos fueron registrados en el cielo pues “han entrado en los oídos del Señor de los ejércitos” Santiago 5:4. En otras palabras, Dios tiene a todo patrón responsable por sus acciones, y especialmente a los que se han enriquecido a expensas de los obreros que no recibieron el pago correspondiente a su labor. Dios está disgustado y desagradado con ellos.
Hay un cambio de tema en el verso 7 y Santiago se dirige a los que han sufrido. Sus palabras de consuelo siguen hasta el verso 20 y sirven para instruir a todos los que sufren injustamente. Con dos palabras sencillas sintetiza la actitud que deben adoptar: TENER PACIENCIA. Usa el ejemplo del agricultor que siembra y luego espera. Hay mucho motivo para desanimarse cuando uno ha recibido un trato injusto, pero somos llamados a ejercer paciencia y mantener el equilibrio espiritual. ¿Cuál debe ser el incentivo? Verso 8 lo dice: “porque la venida del Señor se acerca.” El día de la cosecha para el creyente será cuando Cristo venga. Resta tener paciencia. –daj
Lectura Diaria: | ||
2 Cronicas 8-9 [leer]
|
/Ezequiel 33 [leer]
|
/Juan 12:20-50 [leer]
|