Darrell Scott era padre de Raquel, una de las víctimas muertas en Littleton, Colorado, cuando dos estudiantes dispararon contra sus compañeros el 20 de abril de 1999. Veamos su testimonio.

“Y conociendo Jesús los pensamientos de ellos, dijo: ¿Por qué pensáis mal en vuestros corazones?” Mateo 9:4

 

Al final 12 estudiantes y un profesor yacieron muertos. Los dos jóvenes alcanzaron a herir 24 personas más antes de suicidarse. Las autoridades lo llamaron un desastre. Don Darrell fue invitado a dirigir la palabra a los congresistas de E.E.U.U. Sus palabras calaron hondamente en la conciencia de todos pues habló francamente de la situación entre la juventud en el día de hoy. Dijo que la situación es el producto del descuido de los mayores. He aquí en parte una traducción libre de lo que dijo:

“Desde los albores de la creación, ha habido el bien y el mal en el corazón de los seres humanos. Cada uno tiene ahí las semillas de la bondad y también de la violencia. La muerte de mi hermosa hija, Raquel Joy Scott, y de su profesor heroico, más la muerte de once estudiantes no debe pasar a la historia en vano. Su sangre reclama por una respuesta. El primer acto de violencia fue cuando Caín mató a su hermano Abel. El villano no era el mazo que usó, sino Caín mismo y la razón de su acto se halla en el corazón de él. En los días que siguieron al desastre, hubo muchos que criticaron diferentes secciones de la sociedad, incluyendo a los clubes de caza, No estoy aquí para defender a los que tienen armas, sino para poner el dedo en el lugar donde reside el problema. El problema está aquí en ustedes, respetados congresistas. Con su permiso quiero leerles algunas líneas que escribí hace cuatro noches. –Han ignorado nuestras necesidades más profundas; Han usado palabras que no son nada más que aire vacío; Nos han robado de nuestra herencia moral; No permiten que las oraciones se escuchen en las escuelas; Y ahora se han escuchado balazos y niños preciosos están muertos. Todos están buscando respuestas y preguntan ¿Por qué? No han comprendido que lo que necesitamos no son más leyes para vivir. ¡Es Dios a quien necesitamos!”

“Somos seres de cuerpo, alma y espíritu. Pero se ha negado algo de valor que llena la parte espiritual, y en su lugar, hay maldad, prejuicio, y odio que causan destrozos. En nuestro sistema educacional, necesitamos valores espirituales. Es un hecho histórico que los que deshonran a Dios abren la puerta a la ira y a la violencia. Cuando algo como la masacre en Columbine ocurre, siempre buscan un chivo para llevar la culpa. No son los cazadores que tienen rifles en sus casas, sino el problema está en el corazón. Mi hijo Craig se escondió debajo de una mesa en la biblioteca de la escuela y vio a dos de sus compañeros muertos a tiros. En aquel momento, ¡oró! Por eso insisto en que debemos tomar a Dios en cuenta”.

 

Dios quiere cambiar al ser humano por medio de la fe en el Señor Jesús. He aquí, un buen punto de partida: “Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; Pruébame y conoce mis pensamientos” (Salmo 139:23). La respuesta de Dios indicará que en Cristo hay paz y amor. “Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús” (Filipenses 4:7). — daj

Lectura Diaria:
Jueces 8:1-35 [leer]
/Isaías 29:1-24 [leer]
/1 Corintios 8:1-13 [leer]