“Y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba en medio” Juan 8:9

A solas con Jesús, qué lugar más dulce y santo para una persona. Un refugio al alma de las acusaciones del mundo, de las intrigas de Satanás, y de los dolores de la vida. Dulce lugar para que el corazón se abra y confiese sus temores y situaciones más escondidas ante los oídos del que tiene amor infinito, ternura y compasión.

A solas con Jesús. Qué diferente serían los cristianos frente al mundo si pasaran más tiempo en esta condición. Qué humildad, gentileza y amor caracterizarían sus tratos, después de compartir en la presencia del Santo. Qué santidad reflejarían, y que todos leerían, Menos juicios acerca de otros y más autoexamen hacia el interior. Qué calma y resignación, y gozosa sumisión a los designios del Señor.

¡Que pasaras mucho tiempo a solas con Jesús!

Adaptado de F. Whitfield/rc

 

Lectura Diaria:
1 Cronicas 17-18 [leer]
/Ezequiel 17 [leer]
/Juan 6:22-44 [leer]