“Sepa yo cuán frágil soy” Salmo 39:4

Salió de su casa temprano. Iba a dar un largo paseo en bicicleta con un grupo de amigos. La ruta consistía en cerros con pendientes y bajadas algo agrestes pero en grupo todo podría ser más entretenido. Sin embargo las cosas no salieron como estaban planificadas.

Sufrió un accidente en condiciones poco claras. Lo concreto es que fue encontrado por un motociclista tendido en una ladera, inconsciente y herido. El rescatista improvisado tomó el celular del accidentado y comenzó a llamar a todos los contactos. Se activó un alarmante operativo de rescate que incluyó un helicóptero. Dos horas después de ocurrido el accidente, Patricio ingresó a una clínica donde recibió atención profesional. Exámenes demostraron lesiones traumáticas en cerebro y columna, pero “gracias a Dios” no debiera tener grandes secuelas. Un día Patricio estaba trabajando hasta tarde. El día siguiente estaba conectado a un ventilador mecánico en una unidad de tratamientos intensivos. El texto del día nos llama a considerar con seriedad nuestra vulnerabilidad. Cuán frágiles somos.

La pregunta es para todos: ¿si yo partiera de este mundo hoy, dónde me encontraría mañana? Cualquiera puede estar en una situación parecida o aun partir de este mundo en un momento más, después de leer este párrafo. El Señor Jesucristo dijo: “está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio” (Hebreos 9:27). Prepárate para venir al encuentro de tu Dios (Amós 4:12). rc

 

Lectura Diaria:
Números 12 y 13 [leer]
/Proverbios 10 [leer]
/1 Pedro 2:1-25 [leer]