La contemplación de Cristo y sus perfecciones, junto con la anunciación de su muerte vicaria son el objeto de la Cena del Señor. ¿Qué ocupa los pensamientos de esta reunión en su asamblea?

“Que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, para contemplar la hermosura de Jehová” Salmo 27:4

 

A continuación transcribimos un hermoso himno de la pluma de Don Gilberto M.J. Lear, que expresa el sentir que cada creyente debiera tener al recordar al Señor Jesús en la Cena del Señor, un primer día de la semana como hoy:

 

“Yo quisiera, Oh, Salvador, Comprender tu gran amor

Cerca de tu cruz morar, Tu agonía contemplar”

 

“Veo yo que Dios en luz, En la muerte de Jesús,

Y veo en su gran dolor, Que también Dios es amor”

 

“Participo ya del pan, y mis ojos mirarán,

A Jesús que en cruz murió, Por mí, indigno pecador”

 

“En la copa yo veré, La figura por la fe,

De la sangre de Jesús, Por mí, derramada en cruz”

 

“Humillado quedaré, Al mirar la cruz por fe,

Oh, ¡cuán vil he sido yo!, Pues por mi Jesús sufrió”

 

En este himno, el autor nos hace mirar los sufrimientos del Señor. Muchas veces en la Cena del Señor los pensamientos de los hermanos se enfocan más bien en nuestra condición humana, nuestra indignidad, nuestra bendición, nuestra posición y nuestra salvación. Somos tan autorreferentes. La adoración es acerca de Él y no acerca de nosotros.

Que podamos contemplar a Cristo y no mirarnos a nosotros. Es cierto todo lo que hemos recibido, pero en la reunión de conmemoración estamos para hacer remembranza de Él y no de nosotros, como el Señor mismo lo dijera: “Haced esto en memoria de mí” (Lucas 22:19, 1 Corintios 11:24, 25). ¿Recuerda el lector al Señor Jesús cada domingo, de la manera que él pidió que los creyentes lo hicieran? –rc

Lectura Diaria:
Esdras 10:1-28 [leer]
/Daniel 11:1-20 [leer]
/Apocalipsis 6:1-17 [leer]