En estos días de tantas encuestas, me gustaría que alguien hiciera una con la pregunta, “¿Acaso usted lee su Biblia en forma constante?”

Nunca jamás me olvidaré de tus mandamientos, Porque con ellos me has vivificado” Salmo 119:93

Un tiempo atrás un investigador escribió que el 80% de las personas que asisten a una iglesia el día domingo no tienen roce con la Biblia hasta el domingo siguiente. Es una cifra perturbadora. Gracias a Dios, hay muchos que no pueden dejar pasar ni un sólo día sin tener una lectura bíblica. Las meditaciones que se distribuyen en libros y por internet no deben ser la única lectura bíblica de un cristiano. La Biblia está disponible en todas partes, incluyendo en versiones que facilitan la comprensión. Una lectura bíblica diaria y contacto con Dios en oración debe ser la práctica de todo seguidor o seguidora de Cristo, como quien toma desayuno o almuerza.

 

Una de las excusas más escuchadas por no leer la Biblia es que “no tengo tiempo”. A pesar de toda la tecnología que hace la vida más fácil, las demandas de ella absorben cada vez más de nuestro tiempo. Sin embargo, ¿no es una ofensa que alguien diga a su Creador, ‘No tengo tiempo para atenderte’? Creo que cabe aquí el Salmo 46:10. Dios dice: “Estad quietos, y conoced que yo soy Dios; Seré exaltado entre las naciones; enaltecido seré en la tierra.” Otro salmo dice más, “Meditad en vuestro corazón estando en vuestra cama, y callad. Selah.” Salmo 4:4. Ciertos hermanos de edad se acuerdan de su juventud cuando el día domingo significaba la reunión en la mañana para la Cena del Señor. Escuela Dominical después de almuerzo en la tarde, y alrededor de las 19:00 horas, la predicación del evangelio. No había mucha locomoción disponible y caminaron muchas cuadras para disfrutar de la predicación de la Biblia. Algunos vivían en sectores muy helados y tuvieron que enfrentar temperaturas de 20 y 30 grados bajo cero en el invierno.

 

Ha habido personas que fueron obligadas a pasar tiempo en el hospital, o en algún lugar desde donde no podían salir. Relatan cuán importante fue para ellos leer una porción bíblica. Se aburrieron de las novelas u otros libros disponibles, pero nunca de la Biblia “Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.” Hebreos 4:12. Con la nueva afluencia en algunos países, ahora hay una oferta de entretenciones y dedican tres o cuatro horas de su tiempo para mirar, pero ¿tomar veinte minutos para leer la Biblia? Se excusan con “no tengo tiempo.” Se requiere un compromiso para que Dios nos hable a través de su Palabra. Algunos buscan la solución rápida como una dieta para bajar de peso en siete días, sin darse cuenta de la necesidad de comprometerse para siempre. Así también es el compromiso requerido para leer la Biblia diariamente. Lamentaciones 3:23 dice que las misericordias de Dios “son nuevas cada mañana.” Si no fuera por la fidelidad de Dios, seríamos consumidos. Son las misericordias de Dios que nos permiten vivir protegidos. Por eso debemos leer la Biblia para fortalecernos a fin de vivir victoriosos en la vida.  –daj

Lectura Diaria:
Génesis 4:1-5:32 [leer]
/Job 6:1-7:21 [leer]
/Mateo 4:1-25 [leer]