“Os declaro, hermanos, el evangelio que os he predicado… que Cristo murió por nuestros pecados, y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras” 1 Corintios 15:1, 3-4

 

La palabra “evangelio” significa “buenas nuevas”. Los pastores que velaban y guardaban las vigilias de la noche cerca de Belén fueron sorprendidos de recibir la visita de un ángel del Señor. Tuvieron gran temor, “Pero el ángel les dijo: No temáis; porque he aquí os doy nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo” (Lucas 2:10). La buena noticia era acerca del nacimiento de “CRISTO el Señor.” Treinta años más tarde, cuando el Señor Jesús salió a enseñar, recorrió “toda Galilea, enseñando en las sinagogas de ellos, y PREDICANDO EL EVANGELIO del reino” (Mateo 4:23). Antes de ir al cielo, Jesús anunció “Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones” (Mateo 24:14). Gracias a Dios que hasta el día de hoy en el mundo entero se escuchan las buenas nuevas, el evangelio de la gracia de Dios.

Este fue un mensaje nuevo en su formato, y nuevo en su contenido. El reino de Dios asequible al ser humano y sólo por la gracia de Dios manifestada en la persona de Jesucristo. ¿Disfruta usted de la salvación anunciada en el evangelio? El evangelio puro es acerca de Jesús, muerto, sepultado, resucitado, y pronto a regresar. ¿Ha creído las buenas nuevas de salvación? Espero que sí. –daj

Lectura Diaria:
Josué 24:1-33 [leer]
/Isaías 19:1-20:6 [leer]
/2 Tesalonicenses 3:1-18[leer]