Para muchos cristianos, leer una porción de las Escrituras todos los días es una práctica que tienen para mantenerse bien en lo espiritual. Como la comida suministra energía al cuerpo físico, la Palabra de Dios suministra fuerza para vivir como Dios quiere.

 

Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación, si es que habéis gustado la benignidad del Señor.” 1 Pedro 2:2

 

¿Tomaste desayuno hoy? Me imagino que sí, aunque fuera un pancito con té. ¿Podrías esperar hasta mañana en la mañana antes de comer de nuevo, sin ingerir nada más en el día de hoy? Me imagino que no, pues necesitamos la comida para mantener el cuerpo en buenas condiciones a fin de cumplir con nuestros deberes. ¿Has visto como un bebé grita cuando tiene hambre aunque esté recién nacido y no sea capaz de pronunciar ninguna palabra para pedir que le den leche? Los padres sabemos cómo son los niños recién nacidos cuando tienen hambre. Algunos niños tienen buenos pulmones para transmitir su deseo de ser alimentado. Pedro usó precisamente esta figura para enseñarnos que el cristiano debe alimentarse a fin de crecer en su fe y así desarrollar su vida de salvado. ¿Cómo está el crecimiento suyo?

 

Hace poco pregunté a unos chicos acaso leían sus Biblias. Sé que a la hora de la cena en casa, los padres les leían un pasaje bíblico y una historia de un libro devocional. Mi interés fue acaso ellos mismos leían la Biblia. Fueron muy honrados y dijeron, “no mucho”, aunque la niña de ocho años afirmaba que leía en la iglesia el día domingo. Les animé para que tomaran tiempo de leer las Escrituras. Pero, ¿qué respuesta darías tu si la pregunta fuera hecha a ti? En el mundo secular, los educadores lamentan que la práctica de leer ha disminuido. Los medios de comunicación como la TV y el Internet usan tanta animación para transmitir sus mensajes que muchos han perdido el hábito de leer. El efecto también se ve en el mundo cristiano y ¿es por eso que las falsas doctrinas cunden?

 

La misma Biblia se recomienda como la fuente que puede nutrir el alma, y embellecer el carácter mientras fortalece el corazón. Considere lo que ella dice: “La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; El testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo. Los mandamientos de Jehová son rectos, que alegran el corazón; El precepto de Jehová es puro, que alumbra los ojos. El temor de Jehová es limpio, que permanece para siempre; Los juicios de Jehová son verdad, todos justos. Deseables son más que el oro, y más que mucho oro afinado; Y dulces más que miel, y que la que destila del panal” Salmo 19:7-10. ¿Quiere una sugerencia para leer algo hoy día? Lea del Señor Jesús en Lucas 6. Hay sugerencias que aparecen en nuestro sitio www.palabrasdevida.cl para todos los días. Desear la lecha espiritual es la única manera de crecer espiritualmente. –daj

 

Lectura Diaria:
2 Samuel 21 [leer]
/Jeremías 5 [leer]
/Gálatas 6 [leer]