Todos conocemos los Diez Mandamientos de Éxodo 20. Son los que reflejan el estándar moral que Dios requiere de la humanidad. Pero hay diez mandamientos en el Salmo 100 y también son dignos de ser obedecidos.

 

Cantad… Servid… Venid… Reconoced (3)… Entrad (2)… Alabadle… Bendecid”  Salmo 100:1-5

 

El verso 5 indica las razones por qué debemos ponerlos por obra, “Porque Jehová es bueno; para siempre es su misericordia, Y su verdad por todas las generaciones”. Los tratos de Dios son bondadosos, pues “JEHOVÁ ES BUENO”. ¿Dónde estaríamos si no fuera por su misericordia? Su MISERICORDIA no es algo que él dispense día o semana por medio, sino “PARA SIEMPRE”. La verdad acerca de nuestro Dios no es como las noticias que cambian diariamente ni las leyes humanas que sufren alteraciones. Su verdad es eterna, “POR TODAS LAS GENERACIONES”. Por eso, podemos recomendar a otros que confíen en nuestro Dios.

 

El primer mandamiento del salmo es para cantar alegremente. Los habitantes de toda la tierra son llamados a hacerlo. Cuán grato va a estar una vez llegados al cielo y con el coro celestial cantaremos “a todo pulmón”. De pura alegría cantaremos porque con su obra en la cruz, Cristo ha hecho posible que estemos allí. Desde ya, podemos comenzar cantando. A veces durante el día con mi himnario en la mano, canto. La voz no es tan melódica como en años anteriores, pero el sentimiento de gratitud está presente.

 

Cuando uno está contento con lo que Dios ha hecho en su vida, es fácil SERVIRLE, y el segundo mandamiento de servicio nos llevará a cumplir con el tercero de VENIR ante su presencia para agradecer lo que hace, v.2. Los tres mandamientos siguientes, el cuarto, el quinto y el sexto requieren un RECONOCIMIENTO de Dios por lo que es en su Ser. Es Supremo, majestuoso, digno de nuestra devoción. “ÉL NOS HIZO” tanto en darnos vida física como también cuando creímos en Cristo, y nos hizo nuevas criaturas. Vea 2 Corintios 5:17-18. Desde este momento pasamos a ser PUEBLO SUYO, Y OVEJAS DE SU PRADO. Cristo pagó el precio de nuestro rescate y la Biblia nos recuerda que  “… habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios” 1 Corintios 6:20. Tomando en cuenta esta gran verdad, será fácil obedecer los diez mandamientos del Salmo 100. (Continuará) –daj

Lectura Diaria:
Deuteronomio 32:15-52[leer]
/Oseas 2:1-3:5 [leer]
/Lucas 17:20-18:42 [leer]